De nuevo, volvemos a revolucionar el mercado, a ser precursores, a atrevernos y a sorprender; otra vez nos hemos embarcado en una aventura gastronómica de destino incierto, pero en la que nos hemos propuesto disfrutar cada momento del viaje: de principio a fin.
A partir de la considerada por muchos mejor carne del mundo, la de Kobe -específicamente de la raza Tajima-Gyu (Negra, en su variante Tajima)-, procedente exclusivamente de la prefectura de Hyogo y, naturalmente, certificada por la Kobe Beef Association, de Japón, hemos creado, en colaboración con Maestros Cecineros de León, un producto que nunca nadie antes se había atrevido a elaborar: nuestras Láminas Imperiales de KOBE.
Un producto de “extrema exclusividad” y alta demanda internacional.
Si la limitadísima producción de carne procedente de la raza Tajima-Gyu que llega a nuestro país implica un reto para poder atender la demanda de nuestros clientes; unir el proceso de elaboración de las Láminas Imperiales de KOBE -que se lleva a cabo en un entorno privilegiado, a más de 1.000 metros de altura, empleando técnicas milenarias de curación-, convierten a este producto pionero en el “adalid” de la exclusividad y un gran exponente del minimalismo artístico culinario.
Su lanzamiento al mercado ha generado un gran interés a nivel mundial (la primera producción se agotó en menos de 24 horas); tanto es así que restauradores y profesionales de referencia internacional en el “Mundo de la Carne”, procedentes de Emiratos Árabes, Hong Kong, USA, Francia y Reino Unido, se han puesto en contacto con nosotros para interesarse por este nuevo hito alimenticio.
Nos pueden copiar, pero siempre seremos los primeros.
“Si te copian, es que has creado un modelo de éxito; si además te critican, es que no saben ni como copiarte”. Esta frase, atribuida a Virginio Gallardo, resume bien nuestra filosofía y cómo nos posicionamos en un sector, el de la Carne, en el que el proteccionismo, la ética y la honestidad que forman parte de la cadena de valor que cualquier empresa del mismo aporta a sus clientes a través de sus productos, brillan cada día más por su ausencia. Todo el mundo vende Rubia Gallega, Wagyu, Buey, Rabo de Toro y, en un horizonte temporal muy cercano, Cecina de Kobe. Vale, estamos listos, pero, al igual que sucediese con nuestro Kuroge Washu, hemos vuelto a ser los primeros y no se lo hemos puesto nada fácil a aquellos que no están dispuestos a honrar la carne y a los animales de los que procede.
Y Cheto, ¿Qué piensa?
Últimamente, sumido en el fragor que supone la temporada de verano, no tiene tiempo de organizar sus pensamientos, pero le hemos arrancado unas palabras que comparto contigo y que simbolizan una nueva declaración de intenciones sobre seguir revolucionando el sector: “Como ya sucediese con nuestro Kuroge Washu, estamos convencidos de que este nuevo producto se convertirá en un referente gastronómico para los paladares más exigentes, una experiencia sensorial única que conquistará a los verdaderos amantes de la carne. Sin embargo, somos conscientes de que la creación de este producto único no está exenta de desafíos, pero los afrontamos con la misma pasión y dedicación que nos ha caracterizado siempre. Cada obstáculo es una oportunidad para superarnos y para volver a sorprenderos”.
Bueno, ahora que ya sabes todo lo que hay que saber sobre nuestras Láminas Imperiales de KOBE, te dejamos el enlace a su ficha de producto. Si tienes suerte, quizá sigan disponibles: https://tienda.caydesa.com/producto/cecina-suprema-de-kobe